viernes, 17 de abril de 2015

Lo socio-laboral y la macroeconomía



Lo socio-laboral y la macroeconomía

Condiciones de trabajos que recuerdan prácticas de tiempos de esclavitud, y que en muchos casos obligan a las personas trabajadoras a emigrar, creyendo en los cantos de sirenas.

Sin embargo, al mismo hay tiempo quienes se atreven a afirmar que en términos económicos, México (que ahora ocupa el 8º lugar mundial) ha desplazado a España (que ocupa el lugar 14).

Paradójicamente, en España, el objetivo es convencer a la ciudadanía para que confíe  en la recuperación económica; e incluso, en el fin de la crisis.

Por eso, ¡no hay que creer mucho en las cifras macroeconómicas!

jueves, 16 de abril de 2015

Del dicho al hecho, un trecho



Del dicho al hecho, un trecho.

El actual papa Francisco ha demostrado estar abierto y ser tolerante hacia la homosexualidad, cuando decía que él no era Dios para juzgar a esas personas. Pero las puertas del Vaticano no se quieren abrir, para recibir al nuevo embajador homosexual nombrado por Francia.

En efecto, Laurent Stefanini lleva ya 3 meses después de su nominación, esperando ser recibido. El señor Stefanini es conocido en el Vaticano por haber ejercido otras funciones anteriormente; de hecho, era muy apreciado. Por eso desde el Vaticano se argumenta que su “no recibimiento” se debe a otra razón: su apoyo público al matrimonio homosexual aprobado ya en Francia, en el año 2013. Menos mal, no se trata  entonces de su orientación sexual.

Sin embargo, la cuestión de fondo puede ser la misma: la homosexualidad. En el año 2007, ocurrió lo mismo con otro embajador homosexual propuesto por Francia. El Vaticano se negó a recibirlo, y Francia tuvo que ceder y nombrar a otro embajador. Por eso esta vez, Francia no quiere cambiar su posición.

Ambas partes están de acuerdo sobre el hecho que el nuevo embajador es un hombre soltero y muy discreto. De ahí, la siguiente pregunta: ¿se está juzgando el atrevimiento (valentía) del nuevo embajador de haber apoyado la felicidad de otras personas?

En todo caso, se trata de lo mismo de siempre. Oficialmente y abiertamente, se habla de la libertad que tienen las personas a la hora de conducir sus vidas; una libertad que siempre debe acompañarse de un trato igualitario. Pero oficiosamente y de manera oculta, se actúa de otra manera, dificultando el alcance de esos objetivos.

Una cosa es entonces lo que se dice, y otra cosa, lo que se hace. Y la espera del nuevo embajador Stefanini lo demuestra. Por eso, del dicho al hecho, hay un trecho.   

martes, 14 de abril de 2015

¡Otro mundo entre iguales es posible!



¡Otro mundo entre iguales es posible[1]!
Sabiendo todo eso (que se puedan manipular sus escritos y/o que les insulten, y “que aquellos que son conscientes de tal manipulación estén tan callados”), no queda más remedio que creer en lo que están haciendo. En ese caso, con mucho orgullo, la pregunta puede ser la siguiente: ¿qué más da?
Desgraciadamente, todos quieren estar en el centro, no solo la derecha como dicen. Y para ello, buscan todo tipo de justificaciones como la de argumentar que “el punto de referencia de nuestro documento es la experiencia escandinava, no la venezolana”.
Para que no manipulen sus escritos, ¿tienen que referirse solamente a la experiencia escandinava, y rechazar otras experiencias aunque les parezcan sostenibles, porque vienen de Venezuela?
¿Solo sirve todo lo que viene de los países escandinavos?
Se puede contestar que no, porque allá también se llevan a cabo experimentos, a ver si funcionan. Más todavía en el plano socioeconómico, donde solo el futuro confirmará si están o no en lo cierto.
De lo contrario, estarían defendiendo la democracia y la igualdad entre personas, pero al mismo tiempo, estarían resaltando su creencia de que algunos países son mejores que otros (aunque esos últimos sean más grandes en tamaño, por ejemplo), pudiendo trasladar la misma creencia hacia las distintas ciudadanías. Estarían diciendo que algunas ciudadanías son mejores que otras.
¡Otro mundo entre iguales es posible!