martes, 21 de julio de 2015

De personas se trata, no de goteras



De personas se trata, no de goteras
El ministro español del Interior compara la inmigración con la gotera que inunda una casa.
De esa manera, el ministro olvida que se trata de personas que en vez de inundar la casa, corren el riesgo de ahogarse en el mar mediterráneo; y que peor aún, la mayoría de ellas, están decididas a enfrentar ese destino, porque no tienen nada que perder.
Por otra parte, parece que el señor ministro no solo tiene una visión corta de la situación, sino que tampoco quiere mirar atrás y escuchar algunas advertencias que desgraciadamente se cumplen.
En efecto, hace casi diez años (en septiembre del 2006) el expresidente de Senegal (Abdou Diouf), recordaba sus propias palabras al opinar sobre la inmigración irregular: “Ya lo he dicho cuando yo era presidente: no podéis parar el mar con vuestros brazos”. Él abogaba por una negociación entre todas las partes enfrentadas en el fenómeno migratorio, para superar así, las políticas de controles policiales que se vienen aplicando.
La posición que sí parece adoptar el ministro español, recuerda la del expresidente francés Nicolás Sarkozy, que el mes pasado (el 19 de junio del 2015) creaba la polémica comparando la inmigración irregular con la gotera en una casa. ¿Será que la intención del ministro español es recrear también la misma polémica?  
Fingen no darse cuenta de que estamos hablando de personas que también piensan y que siempre arriesgan sus vidas cada vez que se incrementan los obstáculos; y no de goteras que se puede  tapar con alguna tecnología más o menos sofisticada.